La orinada virtual es la nueva “pruebita de amort”
“No pedirás que te orinen ni orinarás a nadie virtualmente,
por más tragados que estén” Proverbio Martiniano
El ser humano es como un animal (con todo respeto a los
animales) pero nuestros comportamientos se asemejan en muchos aspectos a la
supremacía que desean tener algunas especies. No hablo de la obsesión por
poseer cosas cual perrito con sus juguetes que medio se le acercan y gruñe (esa
es otra entrada); hablo de la marcada de territorio que muchos necesitan para
decirle al mundo que esa persona les “pertenece”. Hablo de: Ramiro Agujis tiene
una relación con: _ (espacio para el nombre de la persona que acaba de ser
orinada) _
Ya sé que están pensando “Uno tragado hace lo que sea” y sí
tienen razón. Estar tragado es lo más rico que hay en el mundo (después de la
Nutella), y expresar que estás feliz con alguien no tiene nada de malo o sea de
malas por los que están solos; pero a ver manejémonos, el hecho de estar
tragado y feliz, no quiere decir que uno ande por ahí poniendo poemas de 4 párrafos
en Facebook o compartiendo desideratas que en serio a nadie le interesan más
que a usted y a él.
No es malo demostrar, pero demuéstrele solo a esa persona
que le interesa. Los demás no tienen por qué saber que usted ama sus calzones
de pitufos, aparte piense que cuando las cosas se acaben la gente solo va a
servir para decirle: “Te lo dije”, “Ay pero si él era tan lindo contigo”, “Ya
vendrá otro mejor”, “Y tú tan tragada”, “Tranquila el man vuelve arrastrándose”
todo lo anterior falacias del demonio. Y esto sin contar con el bochorno de
irse a Facebook, configuración de cuenta, perfil, tiene una relación con: MALDITA
SEA TENÍA, LA TENÍAAAAA.
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